En el presente día, nuestro recorrido futbolóidico alcanza
ribetes insospechados(?), el último artículo fue dedicado al gran Effenberg, un
auténtico antihéroe, y en el día de hoy, le corresponde la presentación a un
pseudofutbolista(?) mucho más conocido para el gran público, el entrañable
personaje se caracteriza por su dureza en el rectángulo verde, pero también por
su simpática forma de ser, que lo catapulta a este prestigioso blog de nivel
internacional(?), en un principio podríamos tildarlo de antihéroe, pero a
medida que nos metemos en la piel del personaje, descubrimos un personaje
encantador, que hace tópico a aquella famosa frase del Ché Guevara que enuncia “hay
que endurecerse sin perder la ternura jamás”.
Para cumplir con la parte geográfica, podemos mencionar que
nuestro duramente tierno(?) homenajeado proviene de Dinamarca, el más pequeño y
meridional de los países nórdicos. Bella tierra donde la educación es gratuita
incluso en universidades y colegios, existiendo también gratuidad en cuanto a
la estancia en los hospitales y los partos, a su vez, tanto los impuestos como
los salarios son de los más altos del mundo. En otras palabras, estamos hablando
de uno de los estados de bienestar más modernos y desarrollados del mundo, con
igualdad de derechos, ventajas y beneficios para todos los ciudadanos,
transparencia política asegurada y con altísimos índices de prosperidad, al
punto de que varias encuestas sitúan a los daneses como la población más feliz
y satisfecha del mundo, según varias encuestas de opinión e informes realizados
a nivel mundial. De tan feliz población, llega un gordito pelado y divertido para
hacernos felices a todos… NO, NO ES CURLY EL DE LOS TRES CHIFLADOS, es nadie
menos que Thomas Gravesen.